Come what may....
Hoy he prometido que te escribiría un poema. Un poema que nos recuerde siempre este día. Que nos
recuerde que la primera vez que nos amamos, lo hicimos a través de las palabras.
Un poema que hable de tí, de mí, y de la lluvia que caía, lenta y triste, en otoño, en Nueva York. Un poema que hable de la
luz dorada de las calles y del reflejo de las hojas rojas y ocres de los árboles, difuminándose, como
sueños breves, en el agua en Central Park. Un poema que hable del amor, de la
piel, del deseo y de todos los abismos que nos separan.
Un poema que hable del
paisaje de tu alma; ese bosque ocre que se extiende lento, como un puente,
desde tus ojos dulces de miel dorada hasta mis alas.
Un poema que hable de la tristeza, de la lluvia, de la cordura, de tu luz y de la magia.
Un poema para recorrer cada segundo, cada instante único, eterno, de lo vivido hoy. Un poema como un océano de palabras resbalando lentamente desde mi corazón hasta tu alma. Un poema que hable de ti y de la lluvia en los cristales de un hotel del Soho. De tu cuerpo desnudo y del labio, deslizándose despacio entre las sábanas, y de mí, acariciándote a través de las palabras….
Un poema que hable de la tristeza, de la lluvia, de la cordura, de tu luz y de la magia.
Un poema para recorrer cada segundo, cada instante único, eterno, de lo vivido hoy. Un poema como un océano de palabras resbalando lentamente desde mi corazón hasta tu alma. Un poema que hable de ti y de la lluvia en los cristales de un hotel del Soho. De tu cuerpo desnudo y del labio, deslizándose despacio entre las sábanas, y de mí, acariciándote a través de las palabras….
Sueño breve
Por
tus sueños transito, como por un valle,
Por
tu acantilado...